Año: 2016
Plataforma: PS4
Desarrollador: Japan Studio
Mi puntuación: 8
Hoy va tocando una de videojuegos, así variamos un poco. Me gustan las buenas historias y The Last Guardian nos cuenta una preciosa.
No pensemos el dónde ni tampoco el cuándo. Creo que no tiene demasiada lógica estas cuestiones, simplemente es la historia de amistad entre un niño y una bestia. Se tenía mucho hyped sobre el juego y ha cumplido las expectativas, aunque para mi gusto hay ciertos aspectos que podrían haber sido mejores.
Todo comienza con un niño que despierta al lado de una bestia, no sabría decir de qué tipo es, llamada Trico. Tampoco sabemos el nombre del niño, sólo que el narrador de la historia es ese niño de adulto (o que se fuma los Malboro doblados). La bestia está herida y comenzamos a ayudarla, a pesar que esté un poco reacia al principio, poco a poco nos va aceptando a su lado e intentaremos escapar del lugar misterioso. Sobre el niño protagonista decir que podría ser perfectamente el mejor Ninja Warrior de la historia, ya que con los 10 años aproximados que tendrá es capaz de hacer más cosas físicas en un militar estadounidense. Vamos, que tienes los co***es como el caballo de Espartero.
Hasta que no avancemos un 75% del juego no tendremos ninguna pista sobre el mundo que nos rodea, puede desesperar un poco, pero tener la maravillosa compañía de Trico nos dejará absortos en ver cómo actúa.
Los gráficos están bastante bien cuidados y la belleza visual de los parajes refuerza la experiencia del usuario. Sentirte insignificante en las alturas y al mismo tiempo capaz de llegar a cualquier punto lejano a lomos de la bestia es simplemente una gozada para los sentidos.
Es un juego de puzzles. Olvidémonos de acción, disparos y demás, quizás tenga un pequeño ápice plataformero, pero muy muy poco peso tiene en la jugabilidad. El juego tiene un componente bastante negativo: la variedad de acciones. Para ser un juego que dura sobre las 10 horas (me parece), desde el principio estamos haciendo las mismas acciones hasta el final. Todo se resume en subirte a cornisas, coger barriles, saltar, bucear y, cuando no veas la manera de seguir, subirte a Trico para que salte a un lugar elevado. Todo esto sin poder interactuar con casi nada y en un recorrido lineal. A pesar de lo limitado de las acciones, el juego tiene escenas muy emocionantes y de lo más variadas. Vamos a sufrir mucho por no morir y por salvar a Trico. Aunque esto es lo de menos porque los Checkpoints (automáticos) son incontables.
La jugabilidad del personaje principal le falta cierto pulimiento. Entiendo la dificultad de hacer interactuar al protagonista con Trico, puesto que este no para de moverse, agarrarse a su pelaje es una de las acciones clave del juego y se antoja tarea ardua. Otra de las cosas que a veces desespera es la cámara, aunque por regla general falle poco, en otras ocasiones no hay manera de ver por culpa de que Trico se pone delante tuya y ocupa toda la pantalla.
Lo más llamativo del juego, y por lo que merece la pena jugarlo, es disfrutar en tus carnes la relación con Trico. La bestia siempre será controlada por la IA y funciona de una manera bastante realista a la hora de desenvolverse por el entorno e interactuar con el protagonista. Bien es cierto que nos desesperaremos en diversas ocasiones cuando le demos instrucciones a Trico sobre qué tiene que hacer y nos haga caso omiso. Sin embargo pienso que le da más realismo que Trico no haga al 100% tus órdenas, al fin y al cabo es un animal salvaje, no un perro doméstico.
Es un juego que recomiendo para aquellas personas que se quieran tomar un tiempo para dejarse seducir con una historia de amistad increíble, muy sencilla, pero que te llegará al corazón cuando lo acabes. Sinceramente creo que tiene de las mejores IA realizadas en un videojuego, el hecho de ver cómo poco a poco la bestia temible se convierte en una especia de gato manso y protector es digno de una obra maestra. Todo contado casi sin diálogos, con pequeños gestos de la bestia hacia nosotros cuando se alegra por encontrarnos o porque la hemos acariciamos. También puedo decir que si no te va resolver puzzles e ir más a la acción, te desesperará un poco (bastante).
Recomiendo alquilarlo y probar la experiencia (que te da de sobra). Yo por 3 € me lo he pasado tranquilamente en una noche y una tarde (aún me sobran 24 horas). No tiene mucho sentido el rejugarlo porque la historia es totalmente lineal.
¡Felices fiestas corazones! Seguimos trabajando para vosotros
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