Año: 2016
País: EEUU
Director: Charles McDougall
Productora: Amazon Studios
Mi puntuación: 7,5
Bienvenidos de nuevo a mi humilde blog. Ayer estuve grabando un programita para Esem Radio que espero que disfrutéis el próximo lunes ya que lo realicé sobre una de mis series favoritas: Gomorra. Metida la cuña publicitaria más 'sutil' desde la invención del Product Placement vamos con la serie de hoy. Tenía ganas de traeros algo fresco, algo de este año que hemos estrenado y me debatía entre dos series: Mad Dogs y Lucky Man. Visto el episodio piloto de la última me fui directamente a por Mad Dogs, ya que el inagotable Stan Lee ha pegado un patinazo a priori con su nueva serie sobre un detective en horas bajas que sólo merece el cameo del propio Stan (como siempre); sin embargo esto merecería un post aparte sobre Lucky Man que espero poder hacer otro día. Después de la patada a Stan Lee no nos desviemos del tema y vamos con Mad Dogs.
Mad Dogs es un remake de otra serie con el mismo nombre, la diferencia significativa (aparte de la edad de los protagonistas) es que en la versión americana los amigos se van a un país de centro América de vacaciones, Belice, y en la versión de la Reina madre se van a España. Claro que los americanos usan a Belice como un país subdesarrollado para maquinar una trama de delincuencia en las calles y corruptela, no me quiero imaginar a los ingleses el concepto que tienen sobre España; aunque por lo de corruptos si que iban bastante encaminados.
La serie trata las desventuras de un cuatro de amigos que son convocados por un quinto a unas vacaciones en Belice para celebrar la jubilación de este último. La cosa se pone fea cuando empiezan a descubrir que la inmensa fortuna del anfitrión está construida con un oscuro secreto. Sé que me ha quedado una sinopsis muy de cartelera; pero es que tampoco quiero spoilear mucho. La serie cuenta con muchos giros de guion que a veces son demasiado calculados como para creerse que eso puede pasar en realidad, que los cuatro amigos sean tan desgraciados como para llevarse todos los infortunios y meter cada vez más y más la pata. Luego está la propia relación que tienen los amigos entre sí, cuanto más avanza la trama más se sinceran los unos con los otros sobre hechos del pasado. Quizás también sea bastante rebuscado cómo entre ellos se han jodido la vida los unos a los otros y ahí están de postureo. Tienen una amistad más falsa que una anuncio del teletienda.
Lo que más me llamó la atención cuando la comencé a ver es la aparición de Michael Imperioli, A.K.A Cris Moltisanti. El que fuera el capo drogadicto de Tony Soprano recupera un papel mezcla de Cris Moltisanti en un programa de rehabilitación de drogas y un vagabundo en pantalones piratas. Este es un actor que no sé si es que el guion le exigía tener esa pinta; pero es que está sumamente demacrado. El resto del elenco de actores sinceramente los desconocía y bueno, en exceso tampoco es que me hayan enamorado.
El final me ha dejado un poco roto. No sé si está realizado con intención de hacer una segunda temporada o es para cerrar un ciclo, es decir, termina como empezó, sólo que llegó el relevo. Obviamente no os lo voy a spoilear; pero cuando la veáis y os acordaréis de esta frase y reflexionaréis. En definitiva y para cerrar el post: es una serie que engancha bastante, tiene giros de guion que te mantienen con la intriga del qué pasará a continuación. Sería conveniente destacar que cuenta con un muy buen humor negro que me hizo reír bastante en varias ocasiones. Ahora, no es una serie que haya terminado y me quede con la sensación que es una obra maestra, cumple dignamente y entretiene bastante. De momento estaría en las series a seguir del 2016 claramente.
Hasta la próxima shurblogueros
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